Ahora que se acerca la primavera y tod@s queremos vernos bien vamos a aprovechar para desvelar unos mitos y verdades sobre el ácido hialurónico.
Pero ¿qué es exactamente el ácido hialurónico? El ácido hialurónico no es más que un azúcar presente en nuestro cuerpo de manera natural que se encuentra en varios tejidos y órganos, incluyendo la piel, el cartílago y los ojos.
Su función principal es retener agua para mantener los tejidos hidratados y esta capacidad para retener grandes cantidades de agua la vamos perdiendo según va pasando la edad, es por eso que se convierte en un ingrediente crucial en numerosos productos de cuidado de la piel y tratamientos estéticos.
Mito 1: El ácido hialurónico solo se usa para tratar arrugas
Aunque es famoso por su capacidad para rellenar arrugas y líneas de expresión, el ácido hialurónico tiene una variedad de usos. Se utiliza en productos para el cuidado de los ojos, sérums para la piel, e incluso inyecciones para aliviar el dolor en articulaciones afectadas por la artritis.
Mito 2: El ácido hialurónico es un componente artificial
Aunque puede producirse en laboratorios, el ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestro cuerpo, particularmente en la piel, el cartílago y las articulaciones y va disminuyendo con la edad, lo que causa los signos de envejecimiento.
Mito 3: Los efectos del ácido hialurónico son permanentes
Los resultados de los tratamientos con ácido hialurónico son temporales y generalmente duran de 6 a 18 meses, en función de la zona a tratar, el producto empleado y los hábitos del paciente. Con el tiempo, el cuerpo descompone el ácido hialurónico, y los efectos comienzan a desaparecer.
Mito 4: El ácido hialurónico puede reemplazar el colágeno
Aunque ambos compuestos trabajan para mantener la piel hidratada y joven, no son intercambiables. El colágeno proporciona estructura y firmeza a la piel, mientras que el ácido hialurónico retiene la humedad.
Mito 5: Sólo se aplica en labios
También se aplica en lineas de marioneta, surcos nasogenianos, mejillas, mentón, ojeras y nariz.
Mito 6: Todos los ácido hialurónico son iguales
La formulación de los ácidos hialurónicos del mercado son diferentes. Además tenemos diferentes tipos de ácido hialurónico:
- de alta densidad que se utiliza en surcos y lineas de marioneta, para la definición de los contornos faciales (ángulo mandibular, mentón, mejillas…)
- de densidad media para tratar arrugas y líneas de expresión moderadas, así como para agregar volumen en labios
- de baja densidad es para suavizar arrugas e hidratar la piel superficialmente
Mito 7: el ácido hialurónica da volumen
Existen algunos ácido hialurónicos que se encuentran de manera libre y se utilizan para hidratar y nutrir la piel sin aportar volúmen.
Mito 8: No puede aplicarse en verano
Unicamente es necesario evitar el sol en las 72 horas siguientes.
Mito 9: Pierdes la expresividad del rostro
La función del ácido hialurónico es rejuvenecer la piel e hidratarla desde las capas internas de la dermis. Esto aporta a la zona un aspecto luminoso y terso, pero sin cambiar la expresión, como ocurre con el botox.
Mito 10: Sólo lo pueden aplicar médicos estéticos
El ácido hialurónico te lo puede aplicar tu odontólogo habitual siempre y cuando, se haya formado para ello y se aplique en el tercio inferior facial, acompañando a su tratamiento odontológico y asi obtener unos resultados glogales.
Si estás pensando en hacerte algún tratamiento de ácido hialurónico en Clinica Dental Gobela podemos ayudarte. ¡Llámanos!
El ácido hialurónico es un azúcar que se encuentra de forma natural en nuestro cuerpo, presente en diversos tejidos y órganos como la piel, el cartílago y los ojos. Su función principal es retener agua para mantener los tejidos hidratados. Sin embargo, a medida que envejecemos, la capacidad del cuerpo para almacenar grandes cantidades de agua disminuye, lo que hace que este compuesto se vuelva un ingrediente esencial en muchos productos de cuidado de la piel y tratamientos estéticos.
El efecto del ácido hialurónico inyectado generalmente dura entre 6 y 18 meses, dependiendo de varios factores. Estos factores incluyen el tipo de ácido hialurónico utilizado, la zona del cuerpo donde se aplica, el metabolismo de la persona, y la profundidad de la inyección.